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Gracias a que un suelo sano atrapa el carbono, la agricultura Orgánica Regenerativa tiene el potencial de cambiar la forma de cultivar los alimentos y las fibras, además de restaurar la salud de nuestro suelo y clima.
Yanniek Schoonhoven y su marido, Alfonso Chico de Guzmán, son dos productores que lideran la revolución Orgánica Regenerativa, la cual podría transformar nuestro suelo y el medio ambiente para siempre. Tanto los productores como sus campos de cultivo de la Finca La Junquera, en Murcia (España), aparecen en la última película de Patagonia Farmland Restoration Stories: Spain.
En esta entrevista, Yanniek explica el motivo por el que están llevando a cabo la transición hacia una agricultura Orgánica Regenerativa, los retos a los que se enfrentan y las esperanzas que tienen puestas en el futuro.
¿Qué significa la Certificación Orgánica Regenerativa?
Yanniek Schoonhoven: La Certificación Orgánica Regenerativa es algo que comenzó en los EE. UU. y que se está extendiendo progresivamente por Europa. Estamos en proceso de obtener ya la certificación para nuestra finca y seguimos llevando a cabo una transición hacia prácticas regenerativas. En este momento, la finca se considera orgánica, lo que significa que no utilizamos insumos químicos sintéticos, por lo que no contaminamos. Una agricultura Orgánica Regenerativa también implica usar compost, incorporar prácticas de administración del agua, ocuparse de los polinizadores y plantar setos y parterres.
Básicamente, la agricultura Orgánica Regenerativa mejora la salud de la tierra en lugar de agotarla, como ocurre con otras formas de cultivo. Tiene numerosos beneficios, aunque depende de las condiciones intrínsecas de cada zona. La captación de carbono puede producirse más rápidamente en zonas más húmedas, por ejemplo, mientras que puede que se den mayores mejoras respecto a la biodiversidad con otras condiciones.
¿Cuál es la diferencia entre un cultivo Orgánico Regenerativo y otro que no lo es?
Si tienes una granja agropecuaria, puedes implantar prácticas regenerativas sin que sean orgánicas. Por ejemplo, puedes ocuparte de tu propia captación del agua, cavar acequias y colocar trampas para sendimentos, pero también usar pesticidas y herbicidas si la granja no está certificada como orgánica. En mi opinión, esto es algo un poco contradictorio, ya que existe un gran potencial para mejorar la biodiversidad mediante prácticas Orgánicas Regenerativas.
¿Qué os motivó a pasar a un cultivo Orgánico Regenerativo?
Nuestra finca ha pertenecido a la familia de mi marido durante mucho tiempo. Él ha sido testigo de cómo se producía una degradación de la tierra rápidamente y la gente tenía que marcharse de allí como consecuencia de ello. La salud de la tierra está completamente vinculada a la oportunidad económica. Si degradas las tierras con cultivos intensivos, haces que a la gente le resulte muy difícil seguir en ellas.
Mi marido aprendió lo que era la agricultura Orgánica Regenerativa cuando estudiaba en los EE. UU. y la consideramos una forma no solo de conseguir una buena vida para la gente de aquí, en el presente, sino también para la próxima generación. Aquí tenemos una pequeñaaldea con muchas casas en ruinas, pero existe mucho potencial para que nuestra comunidad prospere.
¿Cuáles han sido los mayores retos a los que os habéis enfrentado en vuestra transición hacia una agricultura Orgánica Regenerativa?
El mayor reto, que está relacionado con el lugar donde nos encontramos, en el sur de España, es que todo avanza muy lentamente. Tienes que ser visionario y pensar a largo plazo, ya que lleva mucho tiempo percibir los cambios.
Por ejemplo, puedes hacer un estanque, y al año siguiente ver ranas, abejas y aves. Sin embargo, mejorar el material orgánico del suelo de nuestra finca, a gran escala, puede llevar hasta 20 años. Debido a que nuestro clima es muy caluroso y las lluvias escasean, un bosque puede tardar en crecer 50 años, al contrario que en los Países Bajos, donde podría tardar tan solo diez.
¿Qué potencial crees que podría tener la agricultura Orgánica Regenerativa para España, Europa y el medioambiente en general?
Es el futuro. Estamos viendo cómo se degrada la tierra a un ritmo vertiginoso y no podemos obviarlo. Un paso muy importante en el trayecto hacia una agricultura Orgánica Regenerativa es pasar a un cultivo orgánico. Beneficia a la tierra, a los animales y a la salud de las personas que comen los productos.
Con la agricultura Orgánica Regenerativa, observamos cómo la vida vuelve a nuestra tierra. Si plantas setos y parterres con hierbas aromáticas, comprobarás, al año siguiente, que tienes menos plagas, ya que se reavivan los mecanismos naturales.
¿Crees que la agricultura Orgánica Regenerativa será solo un nicho y algo especializado o puede establecerse como tendencia?
Espero sinceramente que se generalice. ¡Tiene que hacerlo! Lo que vemos aquí, por el momento, es gente que piensa que estamos locos por implantar prácticas Orgánicas Regenerativas. Ven demasiadas malas hierbas y te recriminan en qué estás pensando, pero después de unos años, te preguntan por qué tienes muchas menos plagas en la finca, y poco a poco, comienzan a ver las ventajas de la agricultura Orgánica Regenerativa por sí mismos.
¿Es más caro cultivar productos utilizando métodos Orgánicos Regenerativos?
Depende. En nuestra zona, donde la agricultura es de secano, tenemos un clima extremo con veranos calurosos e inviernos fríos, por lo que no sobreviven demasiadas plagas. Eso facilita los cultivos orgánicos. Por otro lado, en el caso de una zona húmeda, esto puede resultar más complicado, ya que hay muchos más hongos y, probablemente, más plagas. Al final, si calculas los costes, la agricultura Orgánica Regenerativa es más rentable que la orgánica, y tanto la orgánica como la Orgánica Regenerativa son algo menos rentables que las técnicas convencionales, a corto plazo.
Las técnicas que son menos intensivas suelen costar menos y generar menos producción, pero el precio que se paga por tu producto es superior. El equilibrio es delicado, pero si eres capaz de encontrarlo, la diferencia no tiene por qué ser excesiva , y a largo plazo puedes mantener la productividad de tus tierras. También debo decir que esto se basa en nuestra experiencia, en nuestra región concreta, y puede que difiera en otras partes del mundo.
¿Qué consejo darías a otros productores que se están planteando llevar a cabo la transición hacia una agricultura Orgánica Regenerativa?
Prueba poco a poco para no arriesgar demasiado. Intenta convertir una hectárea y, si funciona, puedes probar con algunas más. Si lo arriesgas todo de una sola vez es más difícil. Prueba con una pequeña parte y después amplía lo que funcione.
Llevamos a cabo unos 10 experimentos al año con cosas que supuestamente deberían funcionar y ocho de ellas no lo hacen. Quizás algo no funcione en este terreno o con este clima. Tienes que tener una mentalidad abierta para probar cosas nuevas. Mi consejo también es probar con cosas que no sean demasiado costosas y que puedas hacer de forma más fácil con los recursos a tu alcance.
¿Qué significa comprar un producto Orgánico Regenerativo?
Desde mi punto de vista, estás comprando salud. Para mí, en el caso de los productos que no son Orgánicos Regenerativos, no sabes qué es lo que tienen ni con qué han sido fumigados. Al comprar un producto Orgánico Regenerativo, probablemente estés apoyando una comunidad rural que sea más local, y al hacerlo, no solo ayudas a los productores, sino que apoyas todo el sistema, además de la regeneración del entorno.
¿Cómo ha cambiado lo que producís desde que pasasteis a la agricultura Orgánica Regenerativa?
Pasar a una agricultura Orgánica Regenerativa nos ha hecho probar con la producción de numerosas cosas diferentes. Somos una gran finca de 1700 hectáreas, por lo que tenemos mucho espacio para experimentar y aprender. Antes solo cultivábamos granos, pero ahora hemos diversificado la producción y producimos de todo, desde uvas a pistachos, pasando por almendras, plantas aromáticas y ganado.
¿Nos puedes hablar de la asociación AIVeIAI?
La AIVeIAI es una asociación compuesta por 250 productores de esta zona que colaboramos e impartimos formación y asesoramiento sobre el cultivo regenerativo. Nuestro trabajo da prioridad a cuatro principios: restaurar el capital natural, el capital social y el capital financiero, y servir de inspiración. Consideramos que se necesitan los cuatro para garantizar que cuentas con una transformación holística de las tierras.
Además de colaborar con productores y emprendedores, también trabajamos con niños y celebramos un festival sobre la regeneración. Patagonia ha patrocinado este festival y la plantación de 3000 árboles. Este tipo de cosas reaviva un sentimiento de comunidad y la sensación de que podemos hacer algo positivo por la tierra, en lugar de destruirla. Esperamos que esto ayude a la gente a sentirse más conectada con el lugar donde vive.
Háblanos sobre la Academia de la Regeneración y cuáles son tus aspiraciones con ella.
Observamos que había una gran demanda de alumnos que querían venir a experimentar la vida en la finca, así que decidimos que podíamos satisfacerla y hacer un posible negocio de ello. Fundamos la Academia de la Regeneración y ofrecimos puestos de cuatro meses para que la gente escribiera sus tesis, participara en el cultivo y asistiera a talleres.
Actualmente tenemos ocho alumnos en la finca, y tenerlos aquí nos ayuda mucho a aprender sobre nuestro terreno y sus posibilidades. A la hora de pensar, cuando solo somos dos, nos vemos muy limitados, pero cuando tenemos alumnos que discurren con nosotros y son capaces de supervisar el progreso de determinados experimentos, es mucho más fácil darte cuenta de qué es lo que influye en qué. Hemos aplicado en la finca muchas de las cosas que se les han ocurrido a los alumnos. Por ejemplo, ¿cómo cambian los suelos si añades compost? ¿Cuáles son las mejores plantas para plantar junto a un campo a fin de aumentar la biodiversidad?
Para obtener más información sobre la agricultura Orgánica Regenerativa, visita el sitio oficial de Patagonia
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