Una de las prácticas que está más de moda en nuestro país últimamente es la de "realizar una compra consciente y sostenible", y sobretodo referido al
Una de las prácticas que está más de moda en nuestro país últimamente es la de «realizar una compra consciente y sostenible», y sobretodo referido al campo de la alimentación. Pero, ¿sabemos realmente qué significan estos conceptos? ¿Los usamos de la forma correcta o los decimos porque suenan bien?
En el post de hoy, quiero aclarar qué significan estos conceptos, y como puedes aplicarlos en tu vida para que la próxima vez que vayas a la tienda de alimentación, puedas realizar una compra más consciente y sostenible 🙂
Así pues, empecemos por el inicio:
¿Qué es una compra consciente y sostenible?
Primero de todo, decir que ambos conceptos no son lo mismo, aunque van estrechamente ligados y son bastante interdependientes
Por compra consciente nos referimos al comprar sin estar motivados por el impulso, entendiendo la necesidad que queremos cubrir con cada compra y el valor que nos va a aportar, así como al proceso entero que implica la producción y distribución de un producto. Aunque nos han hecho creer que antes que humanos somos consumidores -muchas veces gracias a un tipo de sociedad que nos invita a no pensar y comprar compulsivamente- la verdad es que con nuestras decisiones de compra estamos realmente decidiendo que futuro queremos para todos nosotros. Si analizamos el objeto que vamos a comprar y pensamos en las repercusiones que tiene (costes materiales, condiciones laborales de los trabajadores, procesos sostenibles, cadena de valor etc.), es muy probable que tu elección de producto cambie.
Por otro lado, la compra sostenible es aquella que tiene en cuenta valores de sostenibilidad medioambiental, la huella que generará el producto que tengamos a nivel de recursos planetarios en cada uno de sus procesos productivos.
Por ello, decimos que no es exactamente lo mismo una compra consciente que una sostenible, pues por ejemplo podemos comprar alimentos ecológicos de forma impulsiva y atendiendo al packaging del prodcuto, pero ello no implica que esta compra haya sido realizada de forma consciente.
Y hechas estas primeras introducciones, pasamos a enumerar los pasos que debes seguir para que tu compra de alimentos sea más consciente y sostenible
#1 Toda compra consciente empieza en casa
Antes de salir de casa, piensa en qué productos realmente te hacen falta. Es muy sencillo ir a la tienda o al supermercado e ir cogiendo productos de más sencillamente porque son vistosos (sí, todos caemos en la tentación de coger las galletas que nos harán sentir como un niño por su super envoltorio), y luego no saber qué hacer con ellos.
#2 La compra se hace después de comer
Si no quieres ser esclavo de las tentaciones de tu estómago y caer en las tentaciones, haz la compra después de haber comido. Con el estómago tranquilo tendrás la cabeza más centrada para seguir la lista que has realizado en casa y no vas a perderte en el estante de las cremas de chocolate
#3 Practica el #realfooding, y si eres un maestro del autocontrol, elimina todos los ultraprocesados
Carlos Ríos y su movimiento Real Food no patrocinan este post, pero estoy muy de acuerdo con su filosofía. Cuando adquieras un producto, comprueba que conoces de qué se trata. Por ejemplo, una lechuga es una lechuga y es una buena compra, pero un producto que contenga elementos como el edulcorante «E-cualquier numeración» es sospechoso de no ser comida real. De nuevo, en la cuenta de Carlos Ríos puedes descubrir un sinfín de buenos procesados que te permitirán comer mejor y dejar de lado la industria de los ultraprocesados
#4 Aplica el siguiente mantra: «No compraré productos sobreenvasados, y eliminaré el uso de plástico siempre que sea posible»
¡Acabemos con los plásticos de un solo uso! Es una de las campañas que está generando más repercusión a nivel mundial. El plástico es uno de los productos más polivalentes que hemos desarrollado como humanidad, pero parece que no acabamos de darle el uso correcto. No tiene sentido usar un producto que tarda 1.000 años en descomponerse para un trayecto de 2 minutos del supermercado a tu casa.
#5 Compra local, de temporada y autóctono
Aaahh benditos aguacates, qué buenos están… y cuántos quilómetros tienen que recorrer para llegar a nuestra mesa. Este es uno de los puntos más complejos de cambiar, pues nos hemos acostumbrado a tenerlo todo durante todo el año. Los melones que compramos en enero son de Brasil, no de Murcia, y la piña tampoco es muy típica verla en cultivos sorianos… El transporte de estos productos sigue siendo bastante contaminante (largos trayectos en barco) y hace que pierdan muchas cualidades organolépticas durante el transporte.
Debemos tratar de comer en la mayor medida de lo posible productos que sean de producción local, con variedades autóctonas (la globalización ha hecho que seamos consumidores muy parecidos, haciendo que la biodiversidad de productos
#6 Reduce la carne
¿Sabes que ahorras más agua comiendo un kilo menos de carne al año que aplicando miles de técnicas de reducción de consumo de agua en casa? Producir un kilo de carne es uno de los procesos menos sostenibles que existen, pues necesita 15.000 litros de agua para que lo produzca. Además, para alimentar el ganado, usamos dos tercios de la producción mundial de cereales, lo que se traduce en un montón de tierras de cultivo destinadas a ello. Por cierto, no te olvides de aplicar medidas contra el desperdicio de agua, no es excusa el comer menos carne.
#7 Compra a granel
Muy en sintonía con el punto número 4, la compra a granel vuelve a estar de moda y está cambiando muchos hábitos en los establecimientos. Llevar tus propios tuppers, frascos y bolsas de tela reutilizable ha pasado de ser visto como una rareza de unos cuantos consumidores, a una práctica que ya se está introduciendo y fomentando hasta en los grandes establecimientos. La compra a granel también es uno de los pilares del movimiento zero waste
Como siempre, si conoces más pasos para realizar una compra en alimentación más consciente y sostenible, no dudes en enviarme un correo a través de la página de contacto!